Wednesday, April 11, 2012

Senador! Devuélvame el voto!

Concepto de moda justamente por lo poco que están de moda los políticos: REPRESENTATIVIDAD. Sabe Ud. lo que significa? Obvio que sí, porque si Ud. me lee es porque es una persona inteligente. Pero no está demás. Representatividad es el acto en que una democracia entrega su poder político a un representante para que este pueda defender, proponer, legislar y exigir en pos de los intereses de su representado. A Ud. le pregunto, esto sucede en la práctica? Porque a mí no me queda claro si en Chile estimulamos la representatividad con la cantidad de ungidos por región, o con la identificación y empatía que sentimos por el pensar, sentir y actuar de estos “honorables”. Lo que sí tengo absolutamente claro, es que nuestros intérpretes no sintonizan con nosotros. Porque tal vez les falta hacer un sondeo en sus respectivos distritos. Acaso cree Ud. que la mayoría de Chile está contra el aborto terapéutico? O piensa todos queremos 2 milloncitos más para nuestros senadores?

Es cierto. Es peligroso el límite entre “hacer lo correcto” y el populismo puro. Pero con temas y decisiones que realmente pertenecen a la ciudadanía, lo mínimo que podemos exigir a nuestros parlamentarios es que ejerzan la REAL REPRESENTATIVIDAD. El problema aquí radica en varios puntos. Tomaré dos. Primero, la forma en que entregamos el poder. Porque no basta con “Ud. me tinca. Voto por Ud. para que decida por mí”. Es necesario el representante se nutra de manera constante del parecer de la masa crítica de su sector. Eso en la práctica no existe. Sino que simplemente opinan por Ud. Segundo, le comento Ud. tiene los políticos que merece, porque fue Ud. y nadie más quien los escogió. Esa es la responsabilidad propia. Porque su voto es premio y castigo, y no lo sabemos utilizar. Cuando votamos, votamos con el corazón. Votamos por el caballero con delantal blanco, o el que tiene cara de bonachón, o también por la que tiene cara de mamá. Nos fijamos acaso en sus propuestas, programas, postura valórica, bienes declarados? Para la próxima elección, piénselo bien. Ud. le dio el poder.

Tuesday, April 10, 2012

Uno propone, la sociedad dispone...

Gran escritora no soy, pero mientras aseaba mi pieza, las dos neuronas que me quedan comenzaron a hacer sinapsis, y me dije, ¿por qué no llevar a las letras este momento cúlmine (por desgracia, irrepetible)?

Si pues, si cuántas cosas uno hace o no hace porque la sociedad lo dicta? Este análisis comenzó ayer cuando vi a un hombre guapo guapo guapo. Y me dije -¿por qué una no puede tener varios pololos al unísono? De haber nacido hombre, podría tener cuantas mujeres yo quisiera sin temor a críticas. Pero así es… En Chile (Latinoamérica en general) se premia la masculina capacidad poligámica, que verdadera e intrínsecamente lo que pretende es homenajear las virtudes amatorias del macho en cuestión. La habilidad de mantener satisfecha a tanta hembra. Y se aplaude, se aplaude lo que es una soberana huevada. Yo propongo varios novios para todas sin que nadie nos diga “Kenita”.

Sociedad formadora de madres. iOh, Dios, nos obligan a ser mamás!!!. Nos regalan muñecas cuando niñas, con el mensaje implícito de “deben ser madres”. Porque en Chile decir “no quiero hijos” es aberrante, inhumano, insensible. No entiendo ese afán de obsequiar güagüas a pequeñas de 7 años, para de a poco hacer surgir ese “instinto materno” que supuestamente toda mujer lleva dentro. Es un atentado a la infancia moldear a las mujeres según patrones de no sé quién. No querer ser madre nunca jamás en la vida es un derecho. No nacimos solo para procrear… por eso el mundo está como está.

Que cuántos años tengo? Que me debo casar? Que debo armar una familia? Que mi falda es muy corta? Que el pelo largo es solo para mujeres jóvenes? No puedo comer chicle con la boca abierta? Debo escribir cosas inteligentes en Twitter? Esto me agota!



Compro isla solitaria. Interesados, contactar aquí.

Tuesday, April 03, 2012

Tolerancia a la chilena.


Zamudio nos refrescó a todos las neuronas. Y también los valores (muy escondidos a ratos). No pretendo ser majadera ni reiterativa con hablar de discriminación, sino que comentaré las aristas relacionadas con el tema.

Siento la discriminación como un engendro de la frase "todos somos iguales". En una sociedad, en donde con sangre se inculca tal "principio", las genereaciones así formadas, no aprenden a reaccionar o a tolerar frente a algo que difiere de esa igualdad preconcebida. Existe una absurda idea que le da a la "diferencia" una connotación negativa. Ese es un colosal error. Todos somos únicos y distintos. Cuando concienticemos tal, cuando entendamos la diferencia es positiva, cuando creamos existe una diversidad (de todo tipo), tendremos lista la base para poder aplicar tolerancia en nuestro diario vivir. Con esto quiero explicar además, que ninguna Ley Antidiscriminación habría evitado la muerte de Daniel y otros. Es un trabajo mucho más arduo el que nos espera, y se relaciona con la educación, esa que se entrega en la casa y en el colegio, y que sirve para toda la vida. Alguien me puede explicar cómo formaremos niños tolerantes, cuando en TV vemos rutinas de humor que se mofan de gays, tartamudos y gordos? Cómo, si practicamente TODAS las personas se refieren a los gays como "fleto" o "maricón"? De qué tolerancia me hablan algunos, cuando en su día a día descalifican a las personas por ser "flaites", "cumas" o parte del "roterío". Acaso no es discriminatorio hacer pebre a un tuitero cuando es comunista o UDI? Es debido trabajar partiendo con un autoanálisis. Está plagado de seudos tolerantes, y a veces también me puedo incluir en este grupo. Empecemos con consecuencia y llegaremos a la tolerancia.